Eugenia de Montijo. Emperatriz.
María Eugenia Palafox Portocarrero y Kirkpatrick, condesa de Teba, más conocida como Eugenia de Montijo (Granada, 5 de mayo de 1826-Madrid, 11 de julio de 1920) fue emperatriz consorte de los franceses como esposa de Napoleón III y dueña del Castillo de Belmonte por herencia de su padre Cipriano Palafox y Portocarrero, XIII duque de Peñaranda.
Nos encontramos a mediados del siglo XIX y el Castillo de Belmonte se viste con sus mejores galas para la inminente visita de Doña Eugenia de Montijo; ilustres personajes esperan pacientes su llegada al castillo.
Durante esta jornada de recreación histórica el visitante disfrutará de todos los elementos característicos de la época; se deleitarán con damas leyendo poesía o teniendo entretenidas charlas, conocerán antiguos juegos de naipes entre caballeros y el oficio del herrero e incluso, podrán relacionarse con un charlatán vendedor de elixires y una gitana echadora de cartas que merodean por la zona.
Sin embargo, la aparente tranquilidad de los habitantes de Belmonte se verá afectada por distintos sucesos: Duelos a pístola por el honor de una dama o hasta un intento de atentado de un anarquista contra Doña Eugenia ¿cómo terminará?, hechos que generarán gran alarma social pero gracias a la rápida intervención de la Guardia Civil todo vólverá a la normalidad.
Durante esta jornada de recreación histórica el visitante conocerá más en profundidad la apasionante vida de esta noble española que llegó a ser regente del imperio francés hasta en tres ocasiones y que ordenó la restauración del castillo de Belmonte de acuerdo con los gustos de la época. Además profundizará sobre la vida, moda y costumbres de mediados del siglo XIX (concretamente entre los años 1850-1870), con hechos tan importantes como los movimientos sociales y políticos que marcaron este período o la fundación de la Guardia Civil.
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BREVE APUNTE HISTÓRICO SOBRE DÑA. EUGENIA DE MONTIJO Y SU VINCULACIÓN AL CASTILLO DE BELMONTE
«Una vez extinguida la rama principal de los marqueses de Villena, el señorío de Belmonte por sucesivos enlaces matrimoniales pasó a las casas de Miranda y de Montijo y, en el siglo XIX, hereda el castillo la condesa de Teba, María Eugenia Palafox Portocarrero y Kirpatrick, que se convertiría en emperatriz de Francia al casarse con Napoleón III.
Su verdadero nombre fue María Eugenia Portocarrero y Kirkpatrick de Guzmán. Nació en Granada (5-5-1826). Al morir su padre (15-5-1839), con tan solo trece años heredó el condado de Teba y fijó su residencia en Madrid y París. En la capital francesa conoció a Luís Napoleón quien, impresionado por su belleza, comenzó a cortejarla. Tras ser coronado emperador de Francia, con el nombre de Napoleón III, se casó con Eugenia (30-1-1853), quien intervino activamente en la política nacional e internacional de su tiempo a través de la notoria influencia que ejerció sobre su marido. Fue regente del imperio en tres ocasiones: 1859, 1865 y 1870.
En 1869 realizó un viaje por Oriente para representar a Francia en la inauguración del canal de Suez que fue construido por un pariente lejano, el diplomático Fernando de Lesseps. En aquella época surgió en el país vecino un afán de restaurar castillos. Dejándose llevar por tal tendencia y siguiendo las teorías del arquitecto Violec-le-Duc, Eugenia, que era propietaria del Castillo de Belmonte y conocía loscomentarios sobre su abandono publicados por José María Quadrado, decidió restaurarlo. Las obras de restauración se le encargaron al prestigioso arquitecto español Alejandro Sureda y costaron más de millón y medio de reales. Tras la caída del imperio francés (1870), cesa la restauración por ella emprendida. Años después la continuará su sobrino, el duque de Peñaranda. Los dominicos que Eugenia trajo de Francia (1881-1885) adaptaron el castillo a sus necesidades como comunidad, con lo que modificaron en parte su disposición original y de modo especial la planta baja a la que dejaron irreconocible.
En uno de sus viajes a España, murió en el palacio de Liria (Madrid, 11-7-1920), a los 94 años, pero mandó que se la enterrara junto a su marido y su hijo en el monasterio de St Michael´s Abbey, en Farnborough (Inglaterra). Su hermana, María Francisca de Sales Palafox Kirkpatrick, que había casado con el duque de Alba, Jacobo Fitz-James Ventimiglia, fue quien aportó la posesión del castillo a la casa de Alba a través de sus nietos, que heredaron los bienes y títulos de Eugenia de Montijo.» *
* Guía oficial del Castillo de Belmonte. Un viaje por la historia. De Don Juan Pacheco a la emperatriz Eugenia de Montijo”. Miguel Salas Parrilla. Fortaleza de Belmonte 2017.